Sobrevolando las nubes y las cúspides de los edificios de Reforma, se encuentra un espacio que parecería existir fuera de al realidad. Un lugar donde el tiempo se detiene, donde el lujo y la elegancia, la sofisticación, la comodidad y el buen gusto unen fuerzas para crear magia: Club 51.
Las vistas desde los enormes ventanales son tan únicas como sus exquisitos servicios en el bar, lounge, restaurante, auditorio, biblioteca, terrazas, privados, suites de hotel, gimnasio, camas de bronceado, vapor, jacuzzi y spa. En realidad, el club abarca tres pisos de la torre, y es el único espacio que no es empleado como oficinas corporativas. Cada piso se especializa en un área.
Desde el proyecto hasta su realización se pensó sólo en lo mejor, creando un espacio que roba suspiros. Su privilegiada arquitectura y ubicación lo han convertido en el club que brinda mayor satisfacción a sus miembros, pues es un lugar que no pasa de moda sino que la impone, de belleza moderna con la elegancia del gusto clásico.
Un club al que se ingresa ‘by invitation only’, fue creado para garantizar a sus socios un lugar privado en donde pueden reunirse con socios y amigos para hablar de negocios, consentirse y pasar momentos agradables. Además aquí cada mes se realizan eventos especiales para sus miembros, entre los que figuran grandes empresarios, servidores públicos, profesionales, académicos, intelectuales y artistas, creando un ambiente muy enriquecedor.
Ser parte del Club 51 es un estilo de vida único en donde crecer y disfrutar con lo mejor de la sociedad. Es un espacio de lujo en las alturas en la ciudad, donde se pueden disfrutar las más finas comodidades, enmarcadas con los gustos exóticos con los que se ha formado.
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