Una imagen dice más que mil palabras, reza un popular y muy atinado refrán. La imagen es la carta de presentación que le damos a los demás, es la forma es la que les hablamos de quiénes somos, de nuestra personalidad, intereses y hasta logros. Por eso, una imagen impecable es la mejor manera de comunicar el éxito sin palabras, y para lograrlo, Ermenegildo Zegna ofrece las telas más exóticas y los cortes hechos a la medida, que reflejan la individualidad y gusto exquisito de los hombres que portan sus diseños.
Mediante Su Misura, las más de 400 variedades de telas extra finas se ajustan al cuerpo con la comodidad de una segunda piel. Es el servicio de lujo que crea a la medida de cada hombre y de sus deseos, trajes sastre y camisas, tan personalizados, que se puede escoger el diseño del cuello, de los puños, el tipo de botones, y se bordan las iniciales en el interior, y para quienes saben que son irrepetibles, se les tejen telas únicas con base en sus gustos, seleccionando el tejido, el patrón preciso y el peso.
Además de trajes, en Zegna se encargan de crear la imagen casual o elegante que se desee, con una gran variedad de diseños de zapatos y artículos de cuero, mancuernillas, cinturones, carteras, gafas de sol, lociones, todo lo necesario para conquistar al mundo con una imagen conquistadora e impecable.
Su Misura es más que la experiencia de un traje hecho a la medida, es toda una experiencia de vida, en la que cada persona y sus necesidades son el centro de atención, el eje alrededor del cual gira el mundo en ese preciso momento. Su elaboración dedicada incluye horas de trabajo realizando minuciosos cortes y costuras, cosiendo los ojales en hilos de seda, tallando de forma artesanal los botones, y haciendo pruebas para asegurarse de que ajuste como una segunda piel al cuerpo de la persona. Además de la finura de las telas, el secreto de los trajes de Zegna reside en la estructura del corte de los hombros, que de acuerdo con sus sastres, son los que le dan la forma al resto.
Las telas son fabricadas en el Lanificio Zegna en Trivero, al norte de Italia, donde cada tejido de lana se lava con el agua fresca que desciende de los arroyos alpinos. La tela obtenida es famosa por ser insuperable en términos de calidad, finura y resistencia. Basta con comparar los finos hilos con los que están hechas con un cabello humano: un cabello mide de 50 a 60 micras, pero una tela de lana extra fina de Zegna está hecha con hilos de 17 micras Zegna, y los tejidos ultrafinos son de 13 micras.
Como si se tratara de alquimia, las telas son transformadas en elegantes piezas de arte, únicas e irrepetibles. No se trata sólo de hacer un traje a la medida, sino de hacerlo a la medida de vida de cada persona.