Holbox es uno de los tesoros mejor guardados del maravilloso Caribe Mexicano, con sus frondosos cocoteros, manglares y plantas rastreras que contrastan con las largas playas, el cielo azul claro y el sol resplandeciente. El ambiente es bohemio y relajado, con un toque de exclusividad único de la isla, es imposible no dejarse seducir por su ritmo de tranquilidad y paz. La amabilidad de los isleños y su hospitalidad latina te hacen sentir como si estas llegando a casa acompañado de un numero infinito de amigos. En Holbox tenemos lindísimos hoteles en donde podemos pasar días soñados, y hay uno que me conquista cada vez que visito esta zona, donde Eva, Mar y todo el equipo vuelven la estancia una aventura de paz y tranquilidad. El hotel de Barbara Hernandez es un oasis que flota en el mar y que nos seduce y enamora, se llama Las Nubes, de arquitectura caribeña, para unas inolvidables vacaciones frente al mar en medio de un entorno íntimo. Se encuentra en una zona de playas semi vírgenes a pocos kilómetros del centro de la zona poblada de la isla de Holbox. En su bar La Brisa podemos descansar del calor con una refrescante copa de vino o con algún martini. Además se puede organizar un paseo en barco a la isla o una excursión de buceo en Cabo Catoche. El hotel también ofrece kayaks, bicicletas y carritos de golf para los huéspedes.
El restaurante La Arena sirve el desayuno, el almuerzo y la cena; y para disfrutar de un martini o un coctel en el salón podemos ir a La Brisa del hotel y ahí encontramos siempre con personajes fascinantes y con la mismita bella Barbara.. Casa Sandra es propiedad de la encantadora Sandra Pérez, quien ha sido la musa y co-autora de Pablo Milanés. El hotel es el reflejo de su pasión por las artes. Sandra, quien es escritora, pintora y artista de tiempo completo, ha delineado las paredes de este hotel con piezas de arte originales -de ella y de otros artistas cubanos-, diseñó personalmente el mobiliario y nombró las habitaciones a partir de inspiraciones: Ilusión, amanecer y sentido… Todo es dentro de un ambiente sumamente acogedor, exquisito y refrescante para escaparse de la rutina, descansar y enamorarse de la vida. Cada una de sus 18 habitaciones y la villa de lujo son espaciosas y con un estilo individual, y demuestran el excelente gusto de Sandra. Las paredes del hotel son de un blanco resplandeciente con hermosos pisos de terracota, los cojines y los manteles son bordados y originales de un artista de la Ciudad de México, lo que da un toque sofisticado. Su restaurante gourmet es un increíble viaje culinario de un lujo cálido y rústico, una deliciosa mezcla de especialidades de la localidad y platillos cubanos, y donde disfrutamos de una gran variedad de pescados y mariscos frescos, bajo las estrellas. El pequeño paraíso terrenal de Holbox con exuberantes playas de arena blanca y serenas olas de agua cristalina, donde el tiempo ha olvidado su nombre y se funde con el infinito, es un lugar mágico que fusiona paisajes excepcionales, rodeado de especies exóticas y calles de fina arena con pintorescas viviendas caribeñas acompañadas por una generosa oferta gastronómica.