Como homenaje al descanso, a la comodidad y a la naturaleza, Banyan Tree adoptó su nombre de este árbol, que en la filosofía oriental es símbolo de iluminación e inspiración. Para esta cadena hotelera de renombre internacional, el descubrimiento y el romanticismo de los viajes se acompañan de los servicios más exquisitos, todo ideado para alcanzar el descanso y relajación en sus diferentes destinos a través del mundo.
Desde sus inicios, la pasión de Banyan Tree continúa hoy en día en sus más de treinta resorts localizados en los sitios más exóticos y paradisíacos del mundo. Su servicio de spa, gallerías y campos de golf se ubican en oasis tropicales como las Seychelles y Maldivas, hasta grandes ciudades como Shanghái y Bangkok.
Uno de las más recientes creaciones de Banyan Tree se erige en los Emiratos Árabes. Ubicado lejos de los rascacielos de Dubai y Abu Dhabi, los dos hoteles Banyan Tree en los Emiratos Árabes son un parada necesaria para todo viajero enamorado del camino.
En Al Wadi Banyan Tree se nos presenta como un oasis de paz escondido en un desierto que parece sacado de un cuento de las mil y unas noches. Se ubica en Wadi Khadeja en los Emiratos Árabes, frente a las aguas del Golfo Pérsico y magníficas montañas de Hajjar Al, las cuales le otorgan un aura surrealista al paisaje.
Las increíbles villas están construidas con adobe en estilo tradicional beduino, y cada una tiene su propia alberca con magnificas vistas del desierto, haciendo que el viajero se sienta en casa. Su spa es espectacular, como en todas las propiedades de Banyan Tree, en que los terapeutas son entrenados en las escuelas de la empresa en Indonesia, Phuket y Lijiang, China. Con sus 4.000 metros cuadrados no hay límite en la calidad de los tratamientos ni en la belleza de su entorno.
Para el viajero aventurero, los alrededores de Al Wadi ofrecen muchas oportunidades. Hay safaris a caballo y paseos en camello, clases sobre la flora y la fauna del desierto, así como tours especializados de observación de aves en el pozo de agua donde las aves y la vida silvestre se congregan. Incluso se puede cazar con halcones y búhos indígenas en una visita a las caballerizas de cetrería.
El Banyan Tree Ras Al Khaimah Beach se encuentra a sólo 20 minutos de Banyan Tree Al Wadi, su hotel hermano del desierto, y a una hora del aeropuerto internacional de Dubai.
Es un exclusivo resort de playa acunado en el enclave de Al Jazira Hamra, traducido como la Isla Roja. Las condiciones ambientales lo convierten en un espejismo de arena fina, palmeras del desierto, el panorama del Golfo Arábigo y atardeceres en aguas azules.
Cada una de las villas de 170m² emula las tiendas nómadas de la tribu beduina, caracterizadas por sus techos de tiendas de campaña en forma de arco y postes de soporte de madera. Al interior, la comodidad de los interiores y de las ventas de piso a techo, que inundan cada villa con luz. También tienen su propia alberca y cabaña de playa, propiamente diseñados y orientados para que los viajeros pasen la noche formando figuras con las millones de estrellas en el oscuro cielo del desierto.
Al final de cuentas, Dubai y Abu Dhabi podrán tener sus horizontes de luces de ciudad y actividad que casi parecieran estrellas. Pero Banyan Tree Al Wadi y Ras Al Khaimah Beach tienen toda la vía láctea.
